Durante los meses de marzo y abril los alumnos se sumergieron en un mundo de puntos, líneas, planos y colores. A través de distintas actividades creativas y lúdicas, comenzaron a reconocer y utilizar los elementos básicos del lenguaje visual. Una de las experiencias más significativas fue la creación de una obra efímera colectiva sobre el piso del aula, realizada con objetos presentes en el taller. Este recorrido fortaleció la motricidad, la expresión y la manera de observar el mundo con ojos más sensibles y creativos.